Per Nilsson, coach del equipo femenil de tenis de la Universidad de Pepperdine, estuvo en la Ciudad de México la semana pasada en el Abierto Juvenil Mexicano para reclutar entre las mejores jugadoras juveniles del planeta.

Ambición de ser TOP 10. Hoy día, Pepperdine está ubicada en el sitio No. 22 del ranking de universidades estadounidenses, pero Per, nativo de Suecia, residente en Estados Unidos desde hace más de dos décadas y reconocido como Coach del Año de la Conferencia del Sureste, tiene planes ambiciosos de posicionar a su equipo en el TOP 10. Para lograr ésto, Per reconoce que es clave su labor de reclutamiento y por eso está muy atento al talento juvenil que se ha dado cita en este torneo Grado A.

¿Trabajo de las federaciones se contraponen a las universidades? Aunque muchas federaciones alrededor del mundo ven a las universidades estadounidenses como sus archienemigos que les quitan a sus jugadores en los cuales han invertido mucho recursos Nilsson dice que todo lo contrario es verdad, apuntando al hecho de que las universidades pueden desarrollar al jugador formado por la federación pero con dinero de la entidad educativa. “Podemos trabajar en conjunto,” dice Per, “Nosotros desarrollamos a la jugadora y lo regresamos a las federaciones cuando lo necesitan”. Además, explica Per, la gran ventaja del tenis universitario es que las tenistas que se graduen tendrán un "Plan B" pues tienen un título universitario en caso de que el tenis profesional no cumpla sus expectativas. "Por otra parte, si las jugadoras están listas para enfocarse 100% en el tenis y cuentan con recursos para fondearlas 4 ó 5 años, entonces tal vez la universidad no es el camino, pero cuando no existen esos recursos, nosotros somos la opción más viable. Ahora mismo tenemos una jugadora cuya federación no cuenta con esos recursos y nosotros la estamos desarrollando con nuestros fondos hasta que esta situación cambie".

John Isner como ejemplo. El entrenador apunta al caso de John Isner, quien se graduó de la Universidad de Georgia y hoy día es el mejor jugador estadounidense ubicado en el peldaño No. 11 de la ATP. “John Isner prueba que el tenis universitario no está peleado con el éxito en el circuito profesional,” explica Nilsson, agregando, “Si una jugadora de mi equipo me dice que aspira a ser profesional, yo le digo que yo le puedo ayudar a lograr ese objetivo. El caso de Isner confirma que el tenis universitario puede ser un apoyo clave en el camino hacia el profesionalismo”.

Diferencia de niveles entre juveniles y universitarios.  Nilsson apunta que la gran diferencia es el nivel de madurez emocional, física y también en los recursos y habilidades que las tenistas exhiben en la cancha.  Sin embargo, nota el entrenador, el diferenciador más obvio es en cuanto a la estrategia de juego donde los juniors exponen su juventud y falta de madurez en el partido. "Tener un coach en cancha que te va orientando en el manejo de un match hace una gran diferencia y esa es una de las grandes ventajas que ofrece el tenis universitario", nos explilca.  

Dos jugadoras mexicanas en la mira. Al cuestionar al coach sobre quienes de las tenistas mexicanas le parecen candidatas de calidad para ser reclutadas por su equipo universitario femenil de Pepperdine, Per nos dice que recientemente se graduó una tenista mexicana de Pepperdine, Alejandra Granillo y que hay dos que han captado su atención: Jessica Hinojosa de 18 años y María José Portillo de 16 años. 

¿Cómo fue tu vivencia en la Ciudad de México?  "Tuvimos una muy buena experiencia en México y definitivamente quiero regresar el año siguiente. Inclusive los tacos de vísceras que nunca antes había comido estuvieron tan ricos que regresamos a ese mismo restaurante la noche siguiente". concluye el entrenador con una sonrisa.